Este EP lanzado por Gordo Trax es un ejemplo de la buena salud del techno en nuestro país
En un contexto en el que la prisa y la instantaneidad propician que cualquier tipo de arte, relación personal o contenido cultural sea cada vez más vacío y carente de cuidado, artesanía o paciencia, sorprende que un productor de Techno debute tras años y años macerando su sonido en la sombra hasta destilar un álbum maduro a la altura de algunos de sus referentes.
En este “Renacer” encontramos un ejercicio completísimo de Techno distópico esperanzador con cierta carga emocional que nos lleva en un viaje sinuoso de principio a fin en el que cada uno de los tracks encaja a la perfección con una de las franjas horarias de la noche.
Comenzamos con Sueño Desvanecido, una intro perfecta: atmosférica, futurista y robótica, con voces en castellano sentando las bases conceptuales de lo que será el EP. ¿Atisbas a entenderlas?
Seguimos con Renacer, Techno en estado puro para búnkers de hormigón que rezuman el sudor concentrado de las víctimas que han caído en su tela de araña y que esperan volver a nacer después de una sesión de bailes infinita.
Las Máquinas del Olvido relaja la tensión con secuencias mentales y bleeps Sci-Fi para maestros a los platos que construyen sus sesiones con pericia y paciencia.
Anhelo es quizás el punto álgido del EP, con la contundencia en bajos y percusiones idónea para llevar al éxtasis cualquier pista del mundo y con un sinte que redobla saliéndose del grid para generar una tensión emotiva única en las últimas horas de la noche.
Y llegamos a Anhelo (Emotional Mix), cuyo nombre lo dice todo… Atisbo coge la musculatura del tema original y lo dota de una secuencia aguda que se introducirá en el cerebro de los clubbers cuando las luces se enciendan evidenciando que ya están listos para Renacer.