deadmau5, el cobarde

Artículo de opinión por Gonzalo Bam.

Hartos. Hartos es la palabra que define cómo estamos muchos a día de hoy con el señor (por llamarlo de algún modo, puesto que de señor tiene bastante poco).

Dejando aparte su notable y notorio bajón musical que sólo consigue satisfacer las vacías entendederas musicales de la gente que parece que le guarda amor por llevar una máscara o por ser el bufón de la corte de Twitter con sus últimas producciones subidas a Soundcloud, vamos a centrarnos en el bochornoso espectáculo que dio ayer el señor deadmau5.

¿Falta de respeto? Sin duda alguna. ¿Falta de valor? Muy probablemente.

Parece ser que deadmau5 no cayó en la cuenta que si quería ‘trollear‘ a Armin y a toda la corte de ASOT, la solución no era hacer el payaso poniendo black y heavy metal en consonancia con un set de techno. (Bueno, ‘techno’ mejor dicho, pero ese es un tema que trataremos después). Así lo único que demuestra es que es un bufón venido a menos, faltando el respeto a un público que no lo merece como son los amantes del trance, que suficiente tienen con aguantar sesiones de trouse y big room por parte de impresentables fracasados como Andrew Rayel o un progressive house pasteloso y repetitivo como el de Eric Prydz (que sí, que es muy bueno, pero es cansino y pesado como él solo) que poco pintan en una fiesta de trance. Llegan a decirle a principios de los 2000 a gente como Eddie Halliwell, Yoji Biomehanika o Judge Jules que esa gente pincha para un público que viene a demandar trance, y no descartéis que saquen la motosierra y se dediquen a reversionar ‘La Matanza de Texas‘ a su manera.

Volviendo al tema principal, deadmau5, aquel tipo que tanto protestaba por lo que es el trance puro, ensalzando los valores de las producciones de Art Of Trance y sellos como Platipus o Perfecto allá a finales del siglo pasado, y que tanto sigue protestando por la versión actual del trance que ofrece su principal exponente Armin van Buuren y su marca ‘A State of Trance‘, no ha tenido el valor de poner trance del de verdad (para su criterio) ni si quiera sus producciones de trance (que las tiene, las tiene), no. Lo más fácil al parecer era dar la nota en el lugar donde no la tenía que dar y abrir, como ya avisó, con black metal y continuar con un techno no muy diferente al que nos presentó junto a Eric Prydz el viernes y del cual nos llevamos empapando ya dos años seguidos. ¿Del estilo? Qué va. De las canciones.
Desde hace dos años llevamos aguantando su copia-pega tanto en los sets comerciales como en los de techno con canciones como ‘WHYT NOYZ – SynthesiZe (Pig&Dan Remix)‘ o el ‘Tony Rohr & Layton Giordani – Careless Suggestions‘.
Al menos tuvo buen gusto a la hora de escoger el cierre de metal con el ‘Ace of Spades‘ de Motorhead.

No contento con ello, decidió dar un recadito a Pioneer cuando, aparentemente, su equipo tuvo cualquier tipo de problema técnico y se vio obligado a resetearlo, acusando algunos pobres ingenuos al ratón de seguir ‘trolleando’ (no, quitar el sonido de golpe no es algo que se pueda considerar trolleo, se nota que muchos tenéis sobrevalorado al ratón y no dais para más que confiar en una fe ciega inexistente de continuos trolleos en cada acción que hace), pero tampoco os culpo por ello, ya saben el refrán de ‘tanto va el cántaro a la fuente que al final se acaba rompiendo’, refrán que deadmau5 se ha ganado a pulso debido a sus continuos amagos de que su equipo tenga aparentes problemas en los sets con ese ‘Windows error edit’ en el que simula que se le apaga el ordenador. (por dios Joel, si pinchas con Mac no pongas el error de Windows, intenta hacerlo creíble).
Al grito de ‘Pioneer, los líderes en tecnología del mundo del DJ. O los amas o los odias. Menudo pedazo de mierda‘, deadmau5 manifestaba su queja en público acerca de los equipos de Pioneer.

Personalmente y a modo de conclusión, mi expresión fue como la de Armin. Reírme por no llorar.
Joel, valórate más a ti mismo como productor y artista, y no dejes que el mundo de la farándula y los escándalos puedan contigo, aunque ya sea, a mi parecer, demasiado tarde.
Juzguen ustedes mismos.