La pintura mancha una noche de trance en Madrid con Paul van Dyk

Decepción y desánimo en general es lo que sintieron la mayoría de los tranceros que asistieron a ver al productor alemán Paul van Dyk el pasado 22 de octubre en la sala La Riviera, en la capital española. Informamos de este evento unos días antes en la que ibamos a contar, aparte del Paul van Dyk (En lo que iba a ser su primera actuación en Madrid tras su aparatoso accidente en su actuación en Utrecht el pasado 27 de febrero), a los colectivos madrileños Harmony Trance, Entrance, Scape y a algunos miembros del colectivo Trance Point, aparte de otros artistas locales.

Horas después de colgar nuestro artículo, el grupo promotor del evento, 2M Group, anunció sold out. Venta de entradas agotadas, cosa muy rara en la escena trance, con lo que se esperaba gran afluencia de gente (Aunque en Twitter, usuarios nos informaron que la venta de entradas a través de la plataforma Ticketea seguía abierto aún después del anuncio).

Además, posteriormente nos llegó la noticia de que la sala secundaria de La Riviera no iba a haber actuaciones, cayendo del cartel automáticamente las actuaciones de los artistas locales a excepción de Harmony Trance y Entrance, además de la «extraña» incorporación de un artista para el cierre del evento en la que su actuación estaría bastante alejado de lo que iba a ser un evento 100% sonido trance. Eso sí, todas estas actuaciones no fueron anunciadas en un line-up y en la que la única información que disponíamos era que Paul van Dyk iba a actuar a partir de la 1:30h.

Nos ha parecido raro ese «sold out», ese cambio de planes en el evento, de que se haya incorporado un deejay para pinchar EDM y de que no hubiera habido un line-up anunciado, como siempre ha sido en todas las fiestas anteriores de la misma promotora. A partir de aquí, describimos lo que nos han informado algunos testigos a este medio de como ha sido realmente el evento entre las 23:30h y las 6:30h. Hemos conocido varios casos de asistentes que se han quedado en la puerta al no haber entradas en puerta y que cuya entrada se ha demorado más de media hora desde la hora inicial del evento por la aparición de grupos de personas vinculadas a MADream, un evento organizado por la ESN (Erasmus Students Network), de reunión de personas de intercambio de estudiantes Erasmus y que, casualmente, se organizaba ese mismo fin de semana. Dichos grupos accedían a la sala La Riviera por un acceso preferente.

El resultado, una pista de baile con mezcla entre asistentes que iban a ver, tanto al artista alemán, como a los colectivos tranceros y grupos de Erasmus identificados correctamente con camisetas blancas, en la que, por cierto, la pista de la Riviera estaba sospechosamente cubierta de serrín. La noche iba transcurriendo con normalidad, con un warm-up del colectivo Entrance a cargo de Victor Prada y luego la actuación de Paul van Dyk sin mayores problemas. Los problemas vendrían sobre las 4:45h, cuando un grupo equipado con pistolas de pintura, se subió al escenario durante la actuación de uno de los integrantes de Harmony y empezaron a disparar pintura hacia la pista central, con el objetivo de pringar a otros asistentes Erasmus a dicho evento (Así hemos visto en algunas grabaciones y fotos en las que, por desgracia, no hemos obtenido el permiso de colgar en este artículo). A partir de ahí, la fiesta dejó de ser para los tranceros y pasó a ser un entretenimiento personalizado para dichos grupos de Erasmus. La pista cambió el sonido trance por EDM.

Lo que iba a ser una anécdota sin mayores consecuencias, fue el origen de una marea de asistentes descontentos por todos estos despropósitos en la sección de «Opiniones» de la página de Facebook de 2M Group.

Hasta aquí, la versión que se conoce por parte de varios asistentes. Ahora bien, ¿Por qué? ¿Realmente esos grupos de Erasmus conocían lo que iba a sonar en ese evento? ¿O simplemente hubo algún tipo de acuerdo entre la promotora del evento y MADream/ESN para colar en este evento una «Paint Glow Party» dedicada únicamente a dichos grupos para el final del evento?. Según asistentes del evento, se anunció esta «Paint Glow Party», claro está, en un inocente cartel en la puerta de la sala y en letra pequeña. No hemos visto ningún anuncio igual días antes en ningún sitio (aunque sí en la web de la propia MADream sin que la promotora diera alusión directa alguna en sus redes sociales).

Entre eso y sumando lo que hemos descrito en el segundo párrafo, como artistas tranceros se han quedado fuera del cartel, como asistentes tranceros se han quedado sin su entrada, como no se anunció un line-up en condiciones y esta pantomima, creemos que, este «sold out», ha sido, un mero maquillaje y limitar el aforo de los que iban exclusivamente a asistir al evento y poder celebrar dos fiestas en una, ya que la misma MADream tenia en su calendario de fiestas de su página web, la celebración de una «Paint Glow Party» «en una de las salas más famosas de Madrid» para el mismo día 22 de octubre, obviamente, sin referencia alguna a que en esa misma sala, se iba a celebrar un evento con Paul van Dyk como cabeza de cartel.

Hemos visto muchas cosas en muchos eventos trance a lo largo y ancho del país en todos estos años, pero mezclar asistentes que fueron expresamente a dicho evento a disfrutar de sonido trance y de los artistas, con grupos de Erasmus que, muy probablemente, eran parte de un plan de entretenimiento reservado para la última hora y en la que primaba otro tipo de actuaciones y fiesta totalmente ajenas a la musicalidad del evento, nos parece una decepción y un engaño para el que haya adquirido humildemente la entrada solo por disfrutar de una noche trancera.

La escena trance no se caracteriza por ser grande y notorio, pero al menos, eventos organizados por diversos colectivos, destacan precisamente por calidad, tanto musical como humana. En este caso, se ha priorizado antes la cantidad que la calidad y esperamos que, o no se repita en próximos eventos, o si hay intenciones de que haya otro experimento así, se informe debidamente y con antelación hacia todo el público que ha pagado por una entrada y unas condiciones que han cambiado el mismo día del evento.